Este es el lema de nuestro magnífico y déspota equipo de Gobierno en Bilbao. El nuevo caso es el del Agente de Policía Municipal que multó a Sustatxa por aparcar mal.
El tema no es si tenía autorización como Concejal Delegado o no y por tanto la multa estaba mal puesta. El tema son las reacciones desmesuradas y déspotas que ha habido después.Sustatxa, no harto ni perezoso, se presentó en la Comisaría de Garellano y según testigos, entró a gritos por la puerta exigiendo que bajara el Director de la Policía Municipal por una cuestión "intolerable". Mientras el Guardia de la Puerta le instó a que se calmara y subiera él, Sustatxa se negó y dijo que no se marchaba hasta que bajara el Director.
El Director de la Policía Municipal, que en opinión propia y de algunos testigos, tenía que haberse quedado arriba para defender la labor de los agentes, aunque hubieran cometido un error (si es que tenía autorización de aparcamiento), bajó con las orejas gachas y escuchó a un Sustatxa, según testigos: "prepotente y asqueroso político que se cree el amo de la ciudad".
Pero esto no quedó aquí. El Sindicato Vasco de Policía (con quien yo no tengo precisamente buenas relaciones, sino todo lo contrario), denunció la situación y es cuando estalló a los medios de comunicación, principalmente El Correo, que durante tres días dieron diversas noticias y contranoticias sobre el tema.
Y hoy, varios meses después, me despierto con que el Agente de las multas en cuestión, es trasladado a San Francisco a hacer la calle. Hasta ahí, todo parecería normal, si no fuera porque el Agente, tiene una recomendación del médico para hacer una segunda labor (labores internas o de segundo grado) en el cuerpo, por problemas de Salud.
Y sin embargo, Maiz tiene que justificar que no es una razón "política sino operativa". Pues no señor Maiz, dígame usted que impresión da, cuando un agente denuncia a un político, y hay una decisión política detrás para cambiarle de destino, cuando un médico recomienda que no se le cambie y usted tiene que justificar que no es político? Da la impresión del escusata non petita, acusatio manifesta. Da la impresión de que Si estás contra mí, iré a por ti.
Pero iré más allá en el asunto, porque quizás no lo sepa mucha gente todavía. Este agente, es uno de los 7 "expulsados" de la segunda promoción en el año 1984 (aprobaron las oposiciones, entraron en la academia, pero no salieron de ella), que tras años de juicios, un Tribunal reconoció que los motivos de su expulsión (tales como "no ser buen compañero" "no tener actitud positiva") eran injustificables e incuantificables y por tanto instaba al Ayuntamiento a readmitirles. Con el Ayuntamiento de Bilbao hemos topado!!
Me pregunto por tanto, ¿habrán sido los 24 años de este agente en el cuerpo así?
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