23 de octubre de 2011

Mis primeras reflexiones

Creo que todos deberíamos hacer el esfuerzo de escribir nuestros pensamientos en este momento tan crucial. Porque puede que dentro de 10 años, cambiado el contexto, necesitemos releer nuestra propia intrahistoria, y así poder colaborar en la necesaria memoria colectiva. 

Todo pueblo, necesita de la historia. Un pueblo sin historia no es nada, porque no tiene memoria. Esta es la razón por la que, muchas civilizaciones, han intentado borrar las huellas de la anterior civilización (el último caso fueron los Talibanes en Afganistán, destruyendo los Budas Gigantes). Si haces desaparecer la historia, el olvido de una generación a otra puede convertir un país en un sitio sin una cultura real, sin tradiciones reales, sin valores ni ética acordes con lo que son y con lo que fueron. Sin historia, uno no tiene las marcas los límites de la ética que te ha impuesto el tiempo para poder convivir. Una sociedad que viva fuera de la realidad, es una sociedad en la que alguien intentó manipular la historia. Por eso, para que no ocurra, participemos no sólo hoy, sino siempre, en el ejercicio colectivo de escribir nuestra individual memoria. 

 El jueves cuando leí el comunicado, estaba en clase de Tecnología de la Información Audiovisual, delante de un ordenador y no daba crédito. La clase, perdió absoluto sentido para mí y sólo pensaba en salir de allí, necesitado de información de medios y de compañeros. Mis primeros sentimientos fueron cuatro:

  1. Alegría por la noticia sin precedentes.
  2. Prudencia por ese resquicio que te queda siempre, de que la historia no vuelva a repetirse.
  3. Sorpresa positiva, por la reacción de todos los partidos.
  4. Tristeza por el recuerdo de los ausentes, y por la pregunta obvia: ¿para qué?
Es obvio que en Euskadi, comenzaba a hacerse real aquella canción de Labordeta: "habrá un día en que todos, al levantar la vista, veremos una tierra, que ponga libertad". Pero todavía no. Ahora mismo estamos fabricando esa señal de tráfico, para que dentro de poco si podamos ponerla en cada muga de Euskadi y exhibirla con orgullo. Una señal que ponga Libertad.

Pero para llegar a ese momento, creo que es justo acordarse de algunas personas. Todas ellas, independientemente del camino que eligieron, me gustase más o menos, fuese más cercano a la teoría de la izquierda abertzale o más cercano a la teoría de la tolerancia cero, desde personas con toda una vida de trayectoria democrática, no puedo dudar que su objetivo era llegar a un día como hoy, principios de días mejores en el mañana.

Por eso no puedo dejar de agradecer a los tres ex presidentes del Gobierno que lo intentaron, Suárez, González y Aznar. Así como agradecer infinitamente al presidente bajo cuyo mandato se consiguió: Jose Luíz Rodriguez Zapatero.

Esta victoria es de todos, pero es obvio que dentro de ese anonimato social que ha trabajado por la paz, hay personas con nombre y apellidos que insisto, cada una tomó un camino más o menos acertado, pero ahora hemos llegado hasta aquí. Hablo del Lehendakari Patxi López (como Lehendakari pero también como líder de la oposición), hablo también del Lehendakari Ibarretxe, hablo de Josu Jon Imaz, hablo de Iñigo Urkullu, hablo de Rodolfo Ares, hablo de Jesú Eguiguren, hablo de Antonio Basagotiti, hablo de Alfredo Pérez Rubalcaba, hablo de personajes de la sociedad como Paul Rios o asociaciones como Gesto por la Paz que cada uno, han aportado su granito de arena, y a los que estoy agradecido.

Hace unos años, veíamos como impensable un momento como este, en el que ETA abandonase su lucha. Y sin embargo aquí hemos llegado. Tocará hacer análisis de los por qués. Tocará escribir sobre los dramáticos recuerdos, así como las emociones que ayer se descontrolaron en el Kursal. A mí también me tocará. Pero mi primera reflexión, mis primeros sentimientos, se traducen en esto.


2 comentarios:

José Angel dijo...

Me gusta mucho el artículo. Yo tambien me llevé una gran sorpresa positiva cuando tuve la noticia de la renuncia de ETA a las armas.
Ahora queda la fase mas templada:
-Superar el excepticismo, pero sin bajar la guardia, e ir lentamente hacia un final del terrorismo.Sin prisas.
-La izquierda abertzale y el mundo nacionalista en general,deben tener muy claro que en todo caso todas sus reivindicaciones deberán pasar por las instituciones democráticas sin mesas ni sillas de negociación, y atenerse a las reglas del juego democrático que la mayoría de este pais nos hemos dado, es decir, a las leyes vigentes. Y si las quieren cambiar, tendrá que tener la mayoría democrática suficiente para ello, y dentro de las leyes.
-No hay otro camino. Es muy triste comprobar que casi cuarenta años despues, vuelven al punto de origen de los años de la transición, del que no deberían haber salido: !!Cuanta sangre derramada y cuanto tiempo y energias perdidas, para nada¡¡
-Espero un arrepentimiento, o sinó todo habrá sido un puro teatro.

Jagoba Álvarez Ereño dijo...

A mi me cogió en la asamblea de Barakaldo.
Por mucho que los de la caverna nos quieran hacer creer que no, es una buena noticia.
Queda mucho trabajo por hacer entre TODOS. Los socialistas debemos impulsar marcos de convivencia.

Perfil

Bilbao, Vizcaya, Spain
Soy Licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas y tengo estudios de Periodismo. He hecho teatro amateur 10 años. He grabado algunos cortos. Soy Formador en Comunicación. He sido tertuliano de la SER, Onda Vasca, Telebilbao y ETB. Escribo, leo, veo cine... Como se ve, mi vida tiene bastante que ver con la comunicación. Estoy dispuesto a abrirme al mundo. ¿Está el mundo preparado para recibirme a mi?