La izquierda abertzale juega con las palabras de los demócratas, mientras planta cócteles molotov en la huerta para que les de frutos...

Estas dos frases, bien podíamos oírselas a cualquier demócrata:

• Pedimos el compromiso de los radicales abertzales con las vías políticas y democráticas
• Seguís con vuestras políticas no democráticas porque igual tenéis miedo de que se vea la realidad

Pero no, están pronunciadas por portavoces de los abertzales radicales (sustituir en la primera frase la cursiva por PSE-EE) que exigen a los demócratas que apostemos por vías democráticas y políticas.

En mi pueblo, eso se llama de una hipocresía de cojones, ya que su exigencia, significa dos cosas:

Una, que se ríen de nosotros.

Dos, que para dejar la violencia sólo vale su vía, la que ellos decidan, lo que ellos consideren que es democracia y nada mas. Y de mientras... pues seguimos quemando contenedores como quien se manifiesta pegando carteles... justificándolo con que la Ertzaintza viene y nos pega. ¿Ya pero por qué os pega? Porque quemamos contenedores. Y ¿por qué quemáis contenedores? Porque nos pega la Ertzaintza... Lógica aplastante, como siempre.

Porque de mientras, seguimos viviendo en ese país en el que mientras nos llaman represores, dictadores, torturadores, con el beneplácito de algunos demócratas que usan ese desprecio para hacer política nacionalista de odio al Estado Estatal (este rizar el rizo a la tontería me lo he inventado yo), otros, de manera coordinada que evidentemente responde a una estrategia decidida en reunión, como quien decide una pegada de carteles, queman Euskadi, mientras sus primos de zumosol... pues dan un pequeño pasito más, y matan. Así de simple. Y matan simplemente por el cuento que os he contado de la Ertzaintza: Porque España nos persigue. Pero nos persigue porque matamos. Ya, pero seguimos matando porque nos persigue. En ese país vivimos.

En el que los que queman, amenazan, rompen la convivencia, extorsionan, roban, secuestran, ponen bombas, matan... y sobre todo, aquellos que llevan 30 años siendo su brazo político, y por el que los demócratas les hemos dado una oportunidad no, una cada día para que abandonen la violencia, juegan con las palabras democracia, tortura, dictadura, represión, refugiados y un largo etcétera.

Claro, que si no les da vergüenza el asesinato, iluso de mi, como se les va a caer la cara de vergüenza con la hipocresía...

La lógica... no funciona en Euskadi.