15 de junio de 2010

La esperanza por la paz está ahí y quiere hacerse fuerte, a pesar de que la estadística diga lo contrario.

El domingo empecé a creérmelo. Supongo que cada uno necesitamos nuestros referentes, y yo escuché al mío. 

Ojo, que yo no dudaba que en la izquierda abertzale se estaba moviendo algo, lo que tenía mis dudas, es si el esfuerzo es únicamente electoral cortoplacista (es decir, estar como sea en las municipales) o es electoral a largo plazo (es decir, que se puedan presentar siempre, con normalidad democrática, es decir, fuera de la tutela de ETA).

Parece por cierto, que nadie está dudando y todos damos por hecho ya, por fin, que esa tutela ha existido y existe, a día de hoy. Parece, de la misma manera, que durante las próximas semanas, y puede que este verano, tengamos lo que puede ser el principio de buenas noticias.

Bien, lo que quiero decir, es que hay una probabilidad muy grande de que lleguemos a la paz, nuevamente. Es un proceso absolutamente lógico, y nació hace unos años. El problema, es que ETA, que tiene armas y no lacasitos, puede intentar dinamitarlo, nuevamente.

Digo que el proceso es lógico, e incluso más rápido, porque las reflexiones a las que está llegando por mayoría la izquierda abertzale y a las que están ayudando otros sectores, son reflexiones que algunos líderes abertzales ya tenían asumidas hace años y es en lo que se fundamentó el proceso de paz. 

El único error del pasado proceso, fue dejarlo todo en los líderes políticos y no trasladarlo a las bases. Eso significó, que cuando a ETA no le convencieron ni sus propios líderes ni, por supuesto, los que estaban dialogando con ella, rompió la tregua. Pero ahora, será mas complicada esa ruptura, en tanto en cuanto han compartido la misma reflexión lógica a todas las bases.

Y ETA es lo único que le quedaba. El apoyo social, la pasimonia o el no rechazo social. Como todo movimiento que se cree de liberación nacional, tiene un brazo armado, un brazo político, pero ninguno de ellos son nada sin el brazo social.

El proceso lógico estaba claro:

  1. Queremos hacer política porque queremos la independencia.
  2. Queremos la independencia y no la estamos consiguiendo
  3. No la estamos consiguiendo porque el Estado no nos ha dado nada
  4. No nos ha dado nada, ni conseguiremos nada mientras ETA mate
  5. No solo porque el Estado no nos dará nada, sino porque nunca ampliaremos nuestra masa social para poner en un aprieto al Estado
  6. Ni si quiera podemos hacer política porque la Ley de Partidos nos hace polvo.
  7. Nunca ampliaremos nuestra masa social porque existe ETA
  8. Luego ETA tiene que desaparecer

En todo este proceso, y quizás por eso escriba este texto, sería conveniente que nos pusiésemos de acuerdo en que, si se llega a la paz, todos hemos tenido que ver en esto. Por un momento me he imaginado una paz en la que la empezamos echándonos a la cabeza los trastos unos a otros. 

Aunque supongo que tendrán que asumir los abertzales, que el complejo de “etarras” les acompañará por muchos años, igual que al PP le acompaña el de franquista, y al PSE le acompaña el del GAL, incluso al PNV, de vez en cuando, le acompaña su traición en Santoña, en una guerra civil de hace 70-80 años. Somos así de estúpidos, pero si es cierto que haciendo una reflexión racional, hemos participado todos en que al menos, exista un proceso de reflexión en la izquierda abertzale, que no tiene marcha atrás.

1.- Es innegable, aunque habrá quien lo intente negar siempre, porque para eso ha hecho oposición a esa Ley siempre, que la Ley de Partidos es la iniciadora del proceso. Algunos dirán que no, sin embargo, ¿ni siquiera me reconocerán los que están en contacto con la izquierda abertzale tradicional, que no se plantea la ruptura interna desde la necesidad imperiosa de estar en las instituciones? Esa necesidad, viene por la ausencia. Y esa ausencia, viene por la ley de partidos.

Discutible, si. Que trata sobre algo muy elemental como es el derecho a sufragio, si. Pero absolutamente legal no solo en España sino en la Unión Europea (Tribunal Estrasburgo) también. Y es que a pesar de lo que nos han dicho, la Ley de Partidos lo único que dice es que si se demuestran vínculos con una organización terrorista, el partido queda ilegalizado  y sus líderes, para poder pertenecer a otro o crear otro, tendrán que demostrar sus no-vínculos a esa organización terrorista. O lo que es lo mismo, que en democracia, violencia y política son radicalmente incompatibles. Y quiero recordar, que la tutela de ETA a la izquierda abertzale tradicional, está precisamente demostrada en este proceso. Es innegable. Otra cosa es que logren, ojalá, darle la vuelta a la tortilla.

Nadie debería creerse, el hecho de que la izquierda abertzale hubiese rechazado a ETA en un contexto en el que Batasuna seguiría siendo legal. 25 años habían tenido para que esto hubiese sido así, y no ha ocurrido. La democracia, no les prohibió participar en el siglo XXI, sino que le permitió participar 25 años en democracia para ver si se hacían demócratas.

Por lo tanto, quiero reconocer al Gobierno del Partido Popular, su labor en la lucha antiterrorista y en la elaboración de esta Ley. Que no me gusta, pero no por ello la considero innecesaria, todo lo contrario.

2.- Es innegable también, que en 2004 (incluso antes) se empezó a tejer un proceso arriesgado y con un alto coste político, pero que merecía la pena. Eso llevó a, mantener la lucha antiterrorista por un lado, pero a aprobar una resolución parlamentaria importantísima, primero en España y luego en Europa, en un contexto en el que ETA llevaba 4 años sin matar, y la izquierda abertzale había trasladado a socialistas, su intención de hacer política y que ETA desapareciese. Hubo un proceso de paz, que se antojó “largo, duro y difícil”. Y aunque el proceso de paz murió, el proceso de desaparición de ETA, sigue estando vivo, por lo que sigue siendo ese proceso “largo, duro y difícil”. Se intentó con un proceso de diálogo, ETA lo rechazó y posteriormente se cerró todo el diálogo posible para que ETA recordase que ese proceso de diálogo lo estaba haciendo porque estaba más débil que nunca. Que si no quería abordarlo, allá ella, pero se le recordaría que no tenía nada que hacer mas que matar. Se avisó que el siguiente proceso, tendría que ser diferente.

Es por ello, que quiero reconocer al Gobierno del PSOE y al PSE-EE su labor en aquel proceso de paz que nos ha llevado también a este contexto.

3.- En todo aquel proceso anterior, hubo una persona destacada que apostó por el mismo proceso y no tenía por que hacerlo, era Josu Jon Imaz. Hubo otro, Juan José Ibarretxe, que hizo también sus esfuerzos, sus reuniones, con alto coste político también, por convencer a la izquierda abertzale de que siguiesen por ese camino.

Es por ello, que quiero agradecer y reconocer al Gobierno de Ibarretxe y al PNV sus esfuerzos también por llegar a la paz

4.- Muerto y enterrado por ETA el proceso anterior, ya no podía retomarse. Los detenidos se cuentan casi por centenas y, en un contexto político muy determinado (bienvenido sea, aunque quizás mejor no hablar de él en este artículo), sectores de la izquierda abertzale no tradicional, EA, Aralar y organizaciones como Lokarri, hacen sus esfuerzos por que la izquierda abertzale se convenza así misma de que aquel proceso de 2004 nació por algo, no nació por conseguir nada en 2004, nació porque si se tiene que conseguir algo algún día, o no, tiene que ser en ausencia de violencia. Y ese proceso que crearon unos líderes políticos, tenía que ser asumido por las bases que debían contradecir el carpetazo (triste eufemismo, recuerden que hablamos de muertes) que había pegado ETA al proceso.

Es por tanto, que agradezco también a EA, Aralar y a Lokarri entre otras, su labor por convencer a la izquierda abertzale de exigir a ETA que pare.

5.- Quedaría muy bonito, muy platónico, muy reconciliador, que agradecería también algo a la izquierda abertzale. Creo que me será imposible y es que, primero no hay nada que agradecer todavía, y aunque lo hubiera, lo que está haciendo es su obligación. Y encima, la estamos ayudando. Es una decisión que tenía que haber tomado hace mucho, y por tanto, gracias al resto, pero la izquierda abertzale ojalá que continúe por ese camino, porque es el único camino.

Tengo esperanza. Pero ya en 2006 se me partió el corazón. Hemos tenido que oír en este proceso mucha mierda. Desde el mismo proceso, que algunos lo plantearon como “para más gloria política de López y Otegi”, hasta cuando no existía el proceso, acusándonos “de vivir muy bien con la existencia de ETA, porque así no se habla de otra cosa”. Manda huevos. Queda mucho por perdonar. No solo los asesinatos, que aquí se ha matado por pensar diferente, y a día de hoy, se sigue matando, amenazando, extorsionando, y se vive sin la más elemental de las libertades para poder decir, por ejemplo, Viva España. Sino también la mierda que se ha soltado por la boca, contra los que, lo único que hacíamos, era sobrevivir.

Es así de simple, vivimos en ese país y no hay que negarlo. Pero lo que no quita para que, si el resultado final es la desaparición de ETA y el principio de reconciliación, y para ello hay que tragar algún sapo y alguna culebra… por mi que no quede. Porque mi objetivo no es darme la mano con un abertzale, mi objetivo es que mi hijo pueda dársela con cualquier persona en una Euskadi cosmopolita, plural, gobernada por quien le de la gana a la mayoría… y en paz y libertad.

Convendría entonces, y solo entonces, reconocer que en este proceso participamos todos. E igual, solo igual, además de la paz, conseguimos dejarnos de echar los trastos a la cabeza, en las cuestiones más elementales.

2 comentarios:

Paul Rios dijo...

Con toda sinceridad, tengo que decir que tu artículo me ha emocionado. Aunque en algunas cosas no estemos de acuerdo, tu generosidad, la capacidad de destacar lo positivo en los que mantienen posiciones diferentes a las tuyas, es digno de alabanza.

Me uno al deseo que expresas al final. A ver si logramos la paz y de paso conseguimos aprender a convivir aceptando y respetando las diferencias.

Anónimo dijo...

jajaja, menudo chasco te vas a llevar porque lo más parecido que han hecho en batasuna a "pensar" es mear. A estos hay que ir a por ellos y punto. parece que quieres caer de nuevo en la trampa de esta gente

Perfil

Bilbao, Vizcaya, Spain
Soy Licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas y tengo estudios de Periodismo. He hecho teatro amateur 10 años. He grabado algunos cortos. Soy Formador en Comunicación. He sido tertuliano de la SER, Onda Vasca, Telebilbao y ETB. Escribo, leo, veo cine... Como se ve, mi vida tiene bastante que ver con la comunicación. Estoy dispuesto a abrirme al mundo. ¿Está el mundo preparado para recibirme a mi?